La boa constrictor es una especie de serpiente grande, que no alcanza las dimensiones de la anaconda. Al igual que las anacondas, las boas son animales constrictores no venenosos que viven en zonas tropicales de América del Sur y Central. Son excelentes nadadoras, pero prefieren permanecer en tierra seca, donde suelen refugiarse en troncos huecos y madrigueras de mamíferos abandonadas.
La boa constrictor tiene una piel que cambia de tono según la zona donde habita, lo que le permite camuflarse y acechar a sus presas. Este reptil cuenta con una mandíbula que se caracteriza por estirarse cada vez que ataca a la presa para devorarla por completo.
Las boas constrictor son animales solitarios y crepusculares, es decir, se trata de serpientes que realizan sus actividades durante la noche. También son semi-arborícolas, ya que pasan gran parte del día reposando en las ramas de los árboles, lugar que utilizan también para realizar emboscadas a sus presas.
En cuanto a los cuidados de una boa constrictor, es importante proporcionarle un terrario adecuado con un sustrato de calidad, una temperatura y humedad adecuadas, así como un refugio y una fuente de agua fresca. Además, es fundamental alimentarla con presas adecuadas a su tamaño y ofrecerle un espacio suficiente para que pueda moverse y ejercitarse. Con los cuidados adecuados, una boa constrictor puede vivir entre 20 y 30 años.
